La respuesta que nadie espera: ¿realmente hay un chatbot imbatible?

22 octubre 2025

¿Quién iba a imaginar que preguntar a un chatbot podía volverse más peliagudo que pedir la clave del Wi-Fi en casa de los suegros? Cuando casi la mitad de los franceses acuden cada día a la inteligencia artificial generativa, y más de 800 millones de personas a la semana en el mundo conversan con estos robots, cabe preguntarse: ¿qué chatbot es el rey indiscutible? Spoiler: la respuesta que nadie espera está servida con datos, comparativas y—por qué no—un ligero guiño a la prudencia digital.

ChatGPT: el gigante que reina, pero no todo lo puede

ChatGPT de OpenAI es, sin discusión, el niño bonito del sector. Captura nada menos que el 60% de los usuarios de IA a escala global y suma casi 800 millones de fieles semanales. Desde su lanzamiento a finales de 2022, aunque la competencia ha arremetido con fuerza, este chatbot sigue siendo una referencia sólida en generación de textos e imágenes, lectura de documentos y síntesis de contenido de internet. Su última versión (publicada el 8 de agosto) fue recibida con cierta crítica, pero se sitúa en la cima del ranking LMArena, ganando medallas en comprensión, generación de texto, programación web e interpretación de imágenes según colaboradores y usuarios.

Según Jean-François Deldon, fundador de Yakadata, «ChatGPT es hoy en día el modelo más potente y por eso el más usado. Lógicamente, también es el que más aprende de sus respuestas, en un círculo virtuoso». Sin embargo, su debilidad más citada sigue siendo la escasez de originalidad de ciertas respuestas. ¿Perfecto? Todavía no, pero con 72% de los usuarios franceses de IA volcándose con él, claramente marca tendencia.

El contraataque de Google y otros: Gemini, Perplexity, Le Chat y Claude

¿ChatGPT solo en el mundo? Ni mucho menos. Cuando OpenAI lanzó su bomba, Google no tardó en lanzar su propia carrera armamentista. Bard quedó en el pasado; el presente lleva el nombre de Gemini. Este modelo destaca por su potencia y sus habilidades generalistas (sí, también puede integrarse con Gmail y Google Doc). Lo suyo es el razonamiento profundo y las respuestas bien desarrolladas, aunque hay que advertir que puede resultar algo extenso.

  • Segundo chatbot más usado por el gran público.
  • Compite de cerca con ChatGPT-5 en LMArena.
  • Disponible sin límites ni suscripción mediante Google AI Studio.

Eso sí, tampoco está a salvo de las famosas «alucinaciones» y a veces le gusta oírse demasiado. Google busca cerrar la distancia con ChatGPT, y lo está logrando paso a paso.

Por otro lado, Perplexity (el americano favorito de adolescentes y universitarios), presume de entre 100 y 200 millones de usuarios semanales. Su punto fuerte: siempre cita sus fuentes y está al día con la actualidad, cosa que no todos los competidores dominan. ¿Su talón de Aquiles? Aunque es inmejorable dando respuestas cortas, sintéticas y precisas, flojea con textos más largos o creativos. Según Stéphane Roder (AI Builders), «estoy personalmente dejando ChatGPT por Perplexity, porque las respuestas son mejores, más pertinentes y más precisas».

Le Chat y Claude: Europa entra al juego… ¡más vale tarde que nunca!

Le Chat, lanzado en Francia a principios de 2024 por Mistral AI, llega para sacudir el tablero. ¿Ventajas? Es excelente tanto generando textos e imágenes como analizando documentos (PDF, Excel, Word). Su entrenamiento con gran cantidad de textos en francés le da una ligera ventaja idiomática en la «lengua de Molière», aunque la traducción de sus rivales americanos tampoco se queda atrás.

Destaca especialmente en la protección de datos personales. A diferencia de ChatGPT y Gemini, no se encuentra bajo el Cloud Act estadounidense. Esto significa que no está obligado a entregar datos de usuarios a las autoridades de EE. UU., incluso si están alojados fuera del país. En tiempos donde la privacidad parece un lujo, es un argumento de peso para los más cautos.

  • Manejo competente del francés.
  • Protección de datos reforzada.
  • Capacidad creativa y de análisis de documentos.

Claude, por su parte, desarrollado desde 2021 por exempleados de OpenAI, se proclama el modelo más ético. Prioriza la seguridad y se rige por una “constitución” interna que rechaza los contenidos discriminatorios o de odio. Además, invita espontáneamente a la prudencia en temas sensibles como la automedicación o las inversiones financieras. Lanzado en Francia en mayo de 2024, brilla en respuestas detalladas y tareas creativas. Eso sí, la versión gratuita limita el número de solicitudes permitidas por sesión de cinco horas. Según Arnaud Albalat (Galadrim), «Claude es especialmente apreciado por la comunidad de desarrolladores, y poco a poco se hace hueco en su nicho».

Consejo final: ¿y si jugamos a mezclar?

Con tanto talento entre chatbots, nadie nos prohíbe mezclar herramientas según la tarea y los puntos fuertes de cada una. De hecho, se recomienda comparar respuestas entre varias para filtrar posibles «alucinaciones» o errores. Ojo: ni la herramienta reina ni el modelo especializado están completamente a salvo de equivocaciones. Así que, si quieres la mejor información, pregunta en plural y cruza datos. ¡Tu curiosidad (y tu privacidad) lo agradecerán!

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